El día de ayer se procedió a la clausura de la sala de juegos, ubicada en Calle San Martín, debido que no dispone de un permiso municipal para su funcionamiento y tampoco consta que cuente con los certificados correspondientes de la Superintendencia de casinos que acrediten que no son juegos de azar.

Al lugar llegó Carabineros de Chile, Servicio Impuesto Interno, el inspector municipal y el alcalde de la comuna.