Como todos los Domingos publicamos una crónica hecha llegar a nuestro medio por, por Christian Rodrigo Nuñez La Rosa, Cronista y recopilador de Historias. para Putaendo Informa.
Criatura de aspecto repugnante, que amparado en la noche ataca a los animales succionándoles la sangre hasta causarles la muerte.
Esta semana nos enteramos del caso de la señora Alvarita, quien en su domicilio de Granallas sufrió la muerte de sus aves de corral, todas ellas aparecieron sin una gota de sangre en sus cuerpos, pero ¿qué animal podría causar este tipo de daño a las Aves?
No es primera vez que ocurre esto en Putaendo, sin ir más lejos la semana pasada en el mismo sector y en Rinconada de Silva, hechos similares causaron el deceso de gallinas y gansos. Esta experiencia también fue vivida en el año 2011 en los meses de abril y mayo con la muerte de 20 y 51 gallinas respectivamente en el sector de Sahondé, mientras que un año después, en el mes de octubre 30 gallinas aparecieron decapitadas siempre en el mismo sector.
Los primeros registros de avistamiento se remontan al año 1995 en Puerto Rico, un lugareño lo describió como un ser terrorífico, parecido a un extraterrestre, que pasó frente a la ventana de su casa, luego otros pobladores le describieron como una criatura bípeda de entre 1,20 y 1,50 metros de alto, con grandes ojos, púas a lo largo de su espalda y largas garras. Esta bestia, como la llamaba la gente, era responsable por la muerte del ganado, al cual le succionaba toda la sangre a través de perforaciones en el cuello. Luego de que se hicieran públicos otros ataques, y de que los medios comenzaran a reportar nuevas víctimas que “aparecían sin sangre” en sus cuerpos, la leyenda del chupacabras se volvió viral. Primero recorrió toda la isla, luego se hizo presente en América Latina y el sur de Estados Unidos. En internet encontró una perfecta caja de resonancia, impulsada además por los fanáticos de los objetos voladores no identificados y creyentes de teorías de conspiración.
A principios de la década del 2000, hizo su aparición un chupacabras diferente. Esta versión guardaba rasgos de la criatura que había sido avistada en los primeros reportes, pero ahora menos a un extraterrestre. De hecho, ahora lo describían como un animal sin pelos en la piel, que se desplazaba en cuatro patas, como los perros.
El cambio de apariencia no le hizo perder credibilidad, por cuanto había testigos que reportaban haberlo visto y, por supuesto, estaban los cuerpos criaturas que había sido encontradas o cazadas.
El punto obvio para comenzar la investigación fueron los cuerpos del chupacabras. En su mayoría aparecieron en el estado de Texas y otras zonas en el sureste de Estados Unidos.
Realmente eran tan horribles como las descripciones hechas por los testigos: sin pelos, demacrados y con la piel aparentemente quemada.
Las expectativas se fueron disipando luego que las pruebas de ADN revelaron una realidad bastante corriente. Los cuerpos eran perros, coyotes o mapaches y quiques.
¿Cómo pudieron confundir estos animales con monstruos extraterrestres?
“El motivo por los que estos animales fueron identificados como chupacabras fue porque perdieron el pelo. Tenían sarna sarcóptica causada por ácaros, lo cual es muy común”.
La profesora Allison Diesel, de la Universidad de Texas y especialista en enfermedades inflamatorias de la piel, confirmó esta versión y agregó que esta enfermedad puede ser lo suficientemente espantosa como para hacer lucir a cualquier animal como un monstruo. “Los perros sarnosos son casi calvos, con partes de la piel roja o casi negra, y muy gruesa”, explica la profesora. Si a eso le sumas heridas que el animal se realiza cuando se rasca, terminas con un buen prospecto de chupacabras. Pero si los supuestos chupacabras terminaron siendo animales corrientes, aún quedaban los cuerpos de las víctimas para esclarecer el mito. La explicación de la muerte del ganado y las aves también llegó sin mucho misterio.
Este tipo de animales por lo general son víctimas frecuentes de depredadores comunes en la zona, como perros asilvestrados o quiques. No es raro que estos animales muerdan en el cuello cuando atacan, y dejen los cuerpos en el sitio, por lo que la víctima muere de hemorragia interna, sin que muestre otras heridas más allá de las perforaciones en el cuello, además que los animales que de verdad se alimentan de la sangre de otros no actúan de esta manera.
“Las especies que succionan sangre la obtienen de la superficie de la piel de sus víctimas, no la buscan en la vena yugular”. De hecho, si se comparan las características de animales como los murciélagos vampiros con las del chupacabras, es difícil encontrar alguna similitud.
Los vampiros son pequeños y sigilosos, con dientes especiales para succionar y un sistema digestivo que les permite extraer nutrientes de la sangre.
Una criatura del tamaño de un perro “se moriría de hambre rápidamente si se alimenta de sangre”, debido a la falta de componentes esenciales como la grasa.
Sin embargo, el aspecto de las victimas puede llegar a confundir. “cuando el animal muere, el corazón deja de latir y no hay presión sanguínea”.
“La sangre se filtra hacia la parte más baja del cuerpo, donde se coagula y se espesa. Es lo que se conoce como lividez, y da la impresión de que al cuerpo le han extraído toda la sangre”. De modo que, si toda la mitología que rodea al chupacabras se derrumba ante las pruebas científicas, la leyenda queda en nada.
Nos vemos la próxima semana.