Ordenó aumentar significativamente el aporte de agua de 1,3 m3/s a 11 m3/s.
Por la presión del presidente de la Segunda Sección del río Aconcagua, Mirko Yakasovic, la Delegada Presidencial de San Felipe, Scarlett Pizarro, convocó a reunión el 4 de noviembre con el Director Nacional de la DGA, Rodrigo Sanhueza, el regional, Camilo Mansilla, el consejero Eduardo León y el equipo territorial de la diputada Francisco Bello, donde decidieron favorecer a las comunas de Catemu, Llay Llay y Panquehue, en desmedro de las comunas de Los Andes, Rinconada, Calle Larga, San Esteban, Santa María e incluso parte de San Felipe, además de Til Til y Colina.
Para tales efectos, hicieron llegar ese día la resolución N°972 que ordena a estas comunas aumentar el aporte en la estación de San Felipe de 1,3 m3/s a 11 m3/s, mientras que, en la semana, se mantienen las 42 horas de turno de fin de semana y el aporte a Esval.
Esta medida afectará gravemente el agua disponible para repartir en las comunas de la Primera Sección, donde son más de 6 mil usuarios, obligando a la Junta de Vigilancia a disponer sólo del 28% del agua que pasa por Chacabuquito.
Con esta nefasta medida, “Nadie se hace cargo de quiénes causaron su propia sequía y que sus problemas son, en gran medida, internos. Se esconde la realidad y sólo se exige agua arriba, lo que no debiese hacerse, ni menos abusar de ello. ¿Por qué no les exigen NO aumentar más hectáreas de riego?; Y, ¿No se supone que el agua es una, superficial y subterránea y que la ley señala que la redistribución debiese ser de acuerdo con toda la disponibilidad hídrica? Entonces, ¿Dónde está el reparto de las aguas subterráneas en las resoluciones de intervención del río Aconcagua? No está. No se tocan, nadie las incluye, total, sigamos secando el Valle de Aconcagua. Es por ello por lo que, convocaremos a las 8 comunas, a sus autoridades, a nuestros usuarios, organizaciones y asociaciones de Aconcagua para que defiendan su presente, futuro, su trabajo y sus hogares. No más medidas por presiones de unos pocos, anhelamos igualdad, medidas imparciales, donde no seamos siempre los más perjudicados”, Javier Crasemann, presidente de la Junta de Vigilancia de la Primera Sección río Aconcagua.