David Vergara, conocido popularmente como “El Chico David”, explicó en detalle los motivos que lo llevaron a aceptar la propuesta de la minera Vizcachitas.

 

 

 

Por Patricio Gallardo M.

La micro que realiza el recorrido Putaendo – Los Patos y que es de propiedad del conocido conductor David “Chico” Vergara, ha sido cubierta con propaganda por parte de la minera Vizcachitas, lo que ha generado diversas reacciones a favor y en contra por parte de vecinos y también por parte de las autoridades comunales.

Ante esta situación, decidimos conversar con David Vergara, quien fiel a su estilo nos señaló que desde hace muchos años ha estado golpeando puertas tanto a autoridades locales, provinciales, regionales y nacionales a fin de buscar ayuda para no abandonar el servicio entre Putaendo y Los Patos, donde recordó que en un momento determinado quedó botado por la falta de combustible ya que como lo explicó en su momento es un servicio económicamente inviable y el cual ha mantenido solo por el cariño hacia y desde los vecinos de todo el sector alto de la comuna.

Vergara agregó que recibió un ofrecimiento de la minera Vizcachitas y que antes de firmar el contrato conversó con la administradora municipal y con el concejal Francisco Casas, esperando hasta último momento algún llamado para lograr un acuerdo, lo que nunca ocurrió, accediendo finalmente al contrato con la minera que de manera mensual entrega una cantidad de recursos que no precisó, a cambio que su micro tenga publicidad en los costados, lo que le ha permitido hoy poder solventar el gasto de petróleo e incluso bajar en cien pesos el valor de la tarifa, lo que favorece directamente a los vecinos.

Por último, Vergara indicó que como todos, tiene su propia opinión sobre el proyecto minero, y dijo que hay otras actividades como las malas prácticas agrícolas que hace muchos años están contaminando Putaendo, por lo que no había que satanizar la llegada de la minera, indicando que no siente vergüenza ni miedo, pues, se trata de un acuerdo comercial, una ayuda y que en su caso le permite continuar con un servicio donde nunca las autoridades quisieron ayudarlo.