Por Patricio Gallardo Montenegro, director de Putaendoinforma.
Algunos políticos, servidores y funcionarios públicos además de dirigentes, empresarios y otros podrán tener el enorme “Don” de la palabra o los conocimientos más extensos en sus distintas areas , pero eso no sirve de mucho si no colocan o tienen el valor agregado , eso tan necesario y tan poco habitual en nuestros tiempos.
Esa reelección por cierto no es mía , y es parte de varias conversaciones con Sergio Zamora Muñoz, incluso antes que fuere electo Concejal, un tipo de mirada sencilla de pocas palabras, con dificultades para armar o leer un discurso pero con un corazón y compromiso con el prójimo envidiable y de verdad enorme. Como no recordar cuando éramos pequeños y en el antiguo Hospital San Antonio donde Sergio Zamora trabajó por mas de 45 años, cuando nos dejaba entrar por los baños a escondidas de los médicos para saludar a la mamá cuando estaba en el hospital o cuando lo veíamos cuidar a algún abuelito que no tenia familiares donde en más de una ocasión también los acompañó en solitario hasta su última morada junto a otros compañeros de trabajo.
Podríamos hablar en extenso de la vida de Sergio Zamora , pero afortunadamente la inmensa mayoría de los Putaendinos y Putaendinas lo conocen y saben que palabras más o palabras menos , nadie puede poner en duda su tremendo cariño por los demás y su enorme vocación de servidor público. Pero hay algo que Sergio Zamora dejará como un enorme legado aunque algunos cegados por la envidia y el odio jamás lo reconocerán y es el “VALOR AGREGADO” que colocó en cada una de la distintas actividades que realizó , como trabajador del Hospital San Antonio, dirigente vecinal, Concejal y Alcalde de Putaendo.
Sin lugar a dudas hoy Sergio Zamora, ha dado muestras con hechos concretos que lo suyo es servir para servir y no para servirse, de hecho voluntariamente tomo la decisión de no ser candidato a la Alcaldia para dedicarse de lleno al cuidado de su esposa, dejando de lado una oportunidad que no solo en los números y con el análisis político de diversos sectores lo posesionaban como el más seguro ganador de una elección que le permitiria no tan solo ser por cuatro años más la primera autoridad si no que ganar un buen sueldo de varios millones de pesos.
Criticado incluso por sus pares, por realizar labores asistenciales como pegar baldosas , hacer un baño llevar personas a exámenes, arreglar techumbres, cortar un árbol etc., pues era y es común incluso hoy en su cargo de Alcalde, verlo realizar las mismas actividades de ayuda a personas que lo necesitan. Como todo ser humano no es perfecto y sus errores y aciertos o luces y sombras lo han acompañado en su vida , pero no cabe la menor duda que Sergio Zamora el que por muchos años fue llamado “El Concejal del Pueblo” y que hoy a días de ingresar a los cuarteles de invierno de la política, nos deja un tremendo legado de ejemplo de superación , de sacrificio donde tal como el mismo lo dijo en su momento junto a su familia, sus padres y hermanos conoció la pobreza, la falta de oportunidades pero con garra y su inconfundible deseo de superación supo ganarle a la vida.
Sergio Zamora mostró con hechos que no basta con ser, un buen político, tener el don de la palabra, sabérselas todas o ser un profesional con cientos de títulos, pues con humildad, trabajo, servicio y lo más importante nos demostró que nada de eso sirve si no se coloca “EL VALOR AGREGADO” es cariño y pasión en cada una de nuestras acciones, sobre todo para quienes están en el servicio público, donde hoy afortunadamente el Alcalde electo Mauricio Quiroz, también comulga y hace propio el servir con ese VALOR AGREGADAO que ojala las futuras generaciones reconozcan en un hombre sencillo que dejó huella en la comuna, como lo es y lo será Sergio Zamora Muñoz.