Preocupación existe en la comunidad por los efectos colaterales que dejaría este proyecto que se estaría realizando ya por etapas como es el caso del sector La Orilla donde ya esta funcionando.
Por Patricio Gallardo M.
El día sábado 6 de este mes, se celebró la reunión anual de la Serranía Rda. De Silva, en el sector de la Orilla, donde dentro de varios temas que se trataron, se les comunicó a los comuneros la existencia de una “propuesta” para instalar un parque solar en el sector de Tabolango, la instalación de esta planta en su proyecto original abarca una superficie de 165 Hectáreas con un arriendo anual de 50 UF por cada Hectárea , con un plazo de arriendo de 30 años, lo que permitiria un ingreso anual a la serranía de $239.000.000 anuales y solo en 5 años la no despreciables suma de mas de $1.196.000.000, lo que convierte dicho proyecto en un tremendo negocio para la serranía de Rinconada de Silva.
La propuesta para seguir avanzando en las negociaciones con la empresa fue aprobada por la mayoría de los socios “serranos” pues se entiende que es un muy buen negocio y que según indican los estatutos de la misma serranía las ganancias deben repartirse por partes iguales entre quienes tengan derechos al día en dicha serranía.
Sin embrago no todos estuvieron de acuerdo pues lamentablemente el descontento surge porque quedaría situado a una distancia mínima de las viviendas del sector, y se instalaría en superficie donde cada año se instalan empresas para el proceso de secado de pasas lo que constituye la principal fuente laboral de los vecinos, la única fuente laboral anual para muchas mujeres y jóvenes del sector y otros aledaños, donde para muchos es el ingreso que guardan para la época de invierno.
Anyelín Muñoz Vergara, es hija de uno de los socios de la serranía y una de las pocas personas que se atreve públicamente a cuestionar este proyecto pues reconoce que la gente tiene miedo de hablar en contra de la serranía, y dijo que existe temor por este proyecto que ya esta generando inconvenientes a los vecinos de La Orilla donde los paneles esta ubicados muy cerca de las casas y en las noches por ejemplo el ruido de los motores no los dejan dormir [VER VIDEO ABAJO] .”la mayoría de nuestros vecinos pertenecen al 40% más vulnerable de la población, donde hoy en día se beneficia entre 25 a 30 personas del sector que trabajan en los secados. nuestro sector es zona ganadera, donde algunos vecinos pastorean en terrenos de serranía, también somos productores de quesos de cabra, que es el sustento de muchas familias. Creemos en la necesidad de tener energías más amigables con el medio ambiente, energías renovables, pero estas deben instalarse con sensatez, debe tener la empresa un trabajo directo con los vecinos afectados antes de presentar el proyecto final, necesitamos trabajar en conjunto las medidas de mitigación, conocer los beneficios directos porque nos surgen demasiadas dudas, como de dónde provienen los paneles solares, son nuevos o desechos traídos desde el extranjero; qué se hará con los desechos cuando estos paneles terminen su vida útil; qué pasará con los arbustos autóctonos que existen donde se quieren instalar, se hará una forestación en el sector; cuánta mano de obra permanente de nuestro sector va a requerir 2 o 20 personas; nos veremos beneficiados con la disminución en la cuenta de la luz; cuanto aumentará la temperatura de nuestro sector etc.”. Indicó Angelín Muñoz Vergara.
Esta joven agregó que el sector rechaza el proyecto tal como está, rechazan la cantidad de superficies a ocupar, rechazan la falta de acercamiento que ha tenido la empresa y Serranía con el sector para dar a conocer este proyecto, sino que solo fue informado en una reunión donde solo asisten comuneros y no vecinos. donde el sector no se cierra a trabajar directamente con la empresa y Serranía antes de la presentación del proyecto, de crear una mesa de trabajo, de buscar alternativas. pero Consideran que el beneficio económico de algunos no puede imponerse sobre la calidad de vida de otros.
“El convenio ya estaría aprobado y se realiza por etapas para evitar someterse a un estudio de impacto medioambiental”
Los antecedentes hechos llegar a nuestro medio , indican que si bienes cierto la formalidad de la reunión efectuada con los socios de la serranía se efectuó , no es menos cierto que ya esta casi acordado en su totalidad el proyecto entre la empresa y la serranía donde ya se construyo la primera parte de este proyecto en el sector de la Orilla también en terrenos de la serranía donde se reunieron con socios y dirigentes vecinales para dar cuenta del proyecto que hoy ya esta generando inconvenientes a los vecinos de ese sector.
Por otro lado el hecho que el proyecto se presente y ejecute en partes es decir en a lo menos tres instancia permite que la empresa no se vea obligada a someterse a un estudio de impacto ,ambiental donde en esa instancia si es obligatoria la participación ciudadana y se estaría repitiendo lo mismo que en su momento realizó la empresa Vizcachitas con los sondajes mineros que también eran realizados por etapas y cumpliendo un mínimo determinado para evitar también someterse a un estudio de impacto ambiental tal como hoy esta ocurriendo en el sector de Rinconada de Silva.
El lado oscuro de la energía solar: las plantas mal situadas amenazan el medio ambiente
La energía solar ya es una ayuda para reducir el consumo de combustibles fósiles, pero si no se implanta con sensatez, puede suponer también un riesgo para el medio ambiente
Una investigación publicada e en la revista científica PNAS hace un llamamiento a la sensatez en la transición a un nuevo modelo energético: si no se tiene en cuenta la protección medioambiental en mente, corremos el riesgo de convertir la solución en parte del problema que pretende arreglar. Entre otras cosas, el estudio señala la importancia de situar las plantas solares en lugares cuidadosamente pensados, de forma que no invadan terrenos bajo protección medioambiental, que no amenacen ecosistemas naturales ni especies protegidas y que tampoco acaparen áreas dedicadas a otras actividades económicas.
“Nuestro estudio demuestra que el desarrollo de plantas solares es un motor para el cambio en la cobertura y en el uso del suelo,que son en sí mismos fuente de gases de efecto invernadero”, explica Rebecca R. Hernández, la investigadora jefa y especialista en la Universidad de California – Riverside durante el tiempo en que se realizó el estudio. “Es algo que hemos podido comprobar cuando las plantas se instalan en hábitats naturales, en vez de en áreas ya impactadas por el ser humano, como los techos de los edificios o los aparcamientos de grandes superficies”.